Maldita oscuridad

Quiero que tú imagen regrese hoy a mi. Y así de nuevo poderte sentir. Como imaginar tu silueta en la fría oscuridad. Cómo descifrar nuestros secretos. Corro en círculos convexos, corro, vuelo, como amarte si no estás. Como poder!. Imagino, sueño, con tu piel de seda que al tacto me haga despertar. Como amarte desde la oscuridad!. 


Espacio total entre tú y yo, abismo de fuego que nunca podré recorrer. Te vislumbro en la lejanía, te distingo tenuemente, cada vez hay más oscuridad en tu y yo. Como poder cambiar una realidad que rasga mí alma como una daga afilada. Cómo suplir la falta de tu amor si ya no te puedo casi imaginar, tanto me cuesta recordar, tanto!. Oscuridad maldita que me arrastra cada vez más lejos de tí. Maldita oscuridad. 

Si tan solo pudiera recordar, si tan solo te pudiera tocar una última vez más. Hoy me arranco la piel y abriéndome el pecho contemplo mi corazón herido, casi inerte, ya no puede latir, ya no quiere sentir. Cómo sobrevivir si te di mí vida. Como latir si ya no te sentía. Desierto en esta alma rota, aquí permaneceré contemplando un horizonte estéril, vacío, trataré de imaginar. Me cuesta tanto amarte desde esta oscuridad. Maldita oscuridad. 

Camino perdido en un mundo que gira en dirección contraria a las agujas del reloj. Cómo encontrarte si camino hacia atrás sumido en una inercia contraria a mis pensamientos, cómo elegir un camino si ya no puedo ver. Autómata del amor que ya no puede sentir, ente del averno que vaga totalmente ajeno a todo, a la nada. Ser absurdo que vaga sonámbulo. Bendito sonambulismo que le evade de tanto dolor, de tanta soledad. Jardines aéreos en sus recuerdos. 

Oscuridad maldita hice de tí mí mejor aliada, mí mejor compañera. Cómo vivir sin tí si tú compañía es lo único que tengo. Me revuelco en el frío suelo buscando una señal, una triste luz que me diga donde mirar. Esperanza es lo único que tengo mí querida oscuridad. Hoy me despido de tí, de la falsedad de tu compañía, hoy te abandono, hoy busco mí camino, hoy veo una luz que seguiré sin pensarlo, adiós mí querida oscuridad.